Producción social del hábitat

Desde la década de los sesenta, la Producción Social de Hábitat ha sido el eje rector de nuestro trabajo; al inicio a través del derecho a la vivienda y, posteriormente, manteniendo esta preocupación por ejercer ese derecho, aunado a todas las implicaciones y preocupaciones planteadas en las Conferencias de Naciones Unidas sobre Asentamientos Humanos (Hábitat I y II) y en la Conferencia sobre la Vivienda y el Desarrollo Urbano Sostenible (Hábitat III).

Concebimos este proceso como una forma sostenible de producción de vivienda proyectado al hábitat donde se prioriza el bienestar de los individuos y sus necesidades; dejando a un lado el interés lucrativo que genera esta actividad y, en su lugar, procurando condiciones ideales de vida para las y los habitantes en todos los rubros posibles: desde la salud hasta el desarrollo cultural y educativo.

Reflexionamos sobre el andar en los procesos del hábitat popular; acompañamos, en nuestros inicios, los procesos rurales, luego periféricos y de la centralidad de la ciudad, con los sismos de 1985 así como el proceso democrático. Posteriormente, dimos seguimiento al proceso de reconstrucción y de consolidación de vivienda y barrios para regresar al proceso rural; así, nuestro trabajo se convierte en una espiral de aprendizaje.